Encerrados para recibir el Espíritu Santo

Nos preparamos para celebrar Pentecostés, pero, ante el rebrote de esta pandemia, las nuevas medidas nos llevaron a cerrar nuestros templos, por eso, hemos estado encerrados para recibir el Espíritu Santo.

El día anterior a la celebración de Pentecostés se decretaba cuarentena estricta nuevamente, por lo tanto, no podíamos celebrar la vigilia de Pentecostés con la presencia de los fieles.

Estas nuevas restricciones nos encontró con las flores pedidas y las imágenes preparadas para la decoración de la fiesta de Pentecostés, por lo tanto, preparamos nuestro templo aunque tengamos que tenerlo cerrado a los fieles.

A pesar de estar a puerta cerrada, como las primeras comunidades cristianas, el Espíritu de Dios entra en los templos y hogares que están celebrando esta fiesta, entra en el corazón del que lo invoca, entra en la vida del que necesita del Espíritu de Dios. Así hemos visto que ese espíritu entró en los hogares de los chicos de catequesis, que se hicieron presente a través de fotos y videos para manifestar que el Espíritu de Dios sigue soplando, sigue inspirando, sigue dando esperanza y fortaleza.